Los desequilibrios demográficos también aumentan dentro de la provincia
La considerable ganancia de habitantes que en los últimos 25
años (desde el censo de 1998 hasta el último de 2023) ha experimentado España, ha
pasado de largo por la provincia de Teruel, que ha visto todavía más mermados
sus efectivos humanos.
El conjunto nacional ha aumentado su población en casi un
20% (de 40.143.449 a 48.085.361 habitantes), mientras nuestro territorio ha perdido
cerca del 3% (de 138.906 a 135.046).
ESPAÑA POBRE, ESPAÑA RICA
Teruel, como otras doce provincias, se sigue vaciando. Sin
embargo no ha sido la peor parada. Son, en orden creciente, Cuenca, Teruel,
Soria, Jaén, Cáceres, Ávila, Asturias, Salamanca, León, Ourense, Palencia, Lugo
y Zamora. El recorte porcentual va del 1,93% de Cuenca a un escandaloso 18,55%
en Zamora. Teruel ocupa el segundo lugar, con el 2,78%.
Y, mientras estas provincias se vacían, otras como Baleares
y Guadalajara crecen más del 50%, y también aumentan su censo por encima del
40% Málaga, Tarragona, Girona y Almería.
2009, AÑO DE INFLEXIÓN
No siempre ha sido así en el último cuarto de siglo. Teruel
vio crecer notoriamente su población de los 138.906 empadronados ese 1998 hasta
146.751 en 2009, máximo del siglo. La crisis de la Lehman Brothers golpeó duro
y comenzó una curva descendente que solo cambia de dirección en el último censo
de 2023, 135.046 habitantes, 914 más que el mínimo del año anterior; y podría volver subir
en el de este 2024, pero los datos todavía provisionales son inciertos, pues
suben a 135.485 a 1 de enero, pero bajan hasta 135.294 a 1 de abril.
De los 236 municipios turolenses, apenas 39 incrementaron su población en los últimos 25 años, dos siguen en los mismos guarismos, y los 195
restantes han visto mermado su personal.
FUERTES DESEQUILIBRIOS INTERNOS
Se debe al crecimiento de algunos de los mayores municipios,
pues mientras la provincia perdió 3.860 habitantes entre 1998 y 2923, Teruel capital vio
aumentar sus efectivos en 6.835 vecinos, y Alcañiz en 3.285. El mismo
desequilibrio que se da a nivel nacional, lo tenemos dentro de la provincia. Sin contar las dos principales ciudades, el
resto del territorio ha perdido casi 14.000 vecinos.
Otras importante localidades que ganan población (entendamos
por tales los que tienen más de 1.000 empadronados) son Valderrobres,
Calamocha, Calanda, Mora de Rubielos, Montreal del Campo y Sarrión. Entre ellas
se intercalan dos más modestas, Villastar y Cedrillas, constituyendo el grupo
de las que han engrosado su censo con 100 personas o más.
Si son diez los Ayuntamientos que ganan más de un centenar
de vecinos, en sentido inverso totalizan 38; el que peores cifras arroja es
Andorra, con un descenso de 964 habitantes. Siguen Albalate, Montalbán, Escucha
y Cella; y otras localidades con más de 1.000 habitantes -barrera que pierden
Escucha y Calaceite- en este grupo son Mas de las Matas, Utrillas, Santa
Eulalia e Híjar.
DIEZ PUEBLOS PIERDEN AL MENOS LA MITAD DE SU CENSO
El contraste es mayor si nos fijamos en la evolución demográfica
municipal en términos porcentuales, pues de mueven entre un aumento de casi el
doble (95,35%) en Fuentes de Rubielos y un recorte de más de la mitad (-55,70% en
San Martín del Río.
Los ocho que ganan más de un tercio de población son
municipios de menos de 500 vecinos, con la salvedad de Villastar. Entre los de
mayor tamaño, suben más del 20% Valderrobres, Alcañiz y Teruel.
Y son 62 lo que pierden al menos uno de cada tres
habitantes, diez de ellos la mitad o más. Son todos lugares con menos de 500
censados salvo Alloza; Ojos Negros y Fuentes Claras han bajado de dicho listón
en algún momento de los últimos 25 años.
Otra barrera es la de los 100 censados, que da paso al
concejo abierto; eran 91 municipios en 1998; desde entonces se han salido de
dicha lista Fuentes de Rubielos y Corbalán, pero se suman a ella El Cuervo, Azaila, Rillo, Gargallo,
Crivillén, Castel de Cabra, Hoz de la Vieja, Cañada de Verich, Fórnoles,
Fuentes Calientes, Mezquita de Jarque, Torre de Arcas, Valdelinares, Blesa, Peracense,
Cabra de Mora, Cascante el Río, Castejón de Tornos, Pozuel del Campo, Pitarque,
Huesa del Común, Jarque de la Val, Tramacastiel, Cosa, Bueña y El Castellar.
Curiosamente y para terminar este rollo, el municipio menos
poblado de la provincia, Salcedillo, crece de 8 a 10 censados, un 20%.